miércoles, 28 de octubre de 2015

Hablando de contorno de ojos (belleza)

Hoy en la sección de belleza, voy a dedicarme un poco a contaros desde mi punto de vista, no profesional, sino de alguien que se cuida desde muy joven, lo que mi experiencia me ha enseñado acerca del cuidado que debemos tener del área alrededor de nuestros ojos.

Nuestra mirada puede decir mucho de nosotros, de nuestro cansancio, preocupaciones, estado de ánimo o incluso de la salud. Pero por qué no, si nos ocupamos un poco de cuidarnos, eso nos hará vernos mejor y por lo tanto sentirnos también mejor.




El contorno de los ojos está rodeado por la piel más fina de todo el cuerpo, por ello debe ser una de las más atendidas y más cuidadas, pero sin embargo es a veces, la más castigada.
No son las patas de gallo o las marcas de expresión las que pueden acentuar o delatar la edad, sino el aspecto de cansancio que producen las bolsas o los párpados hinchados.
Existe la creencia acerca de este tema, de que cuando aparecen los signos indeseados es cuando se pone remedio con cremas o con métodos caseros, pero al contrario, es desde muy temprana edad, yo diría que desde los 20 años, que se debe empezar a hidratar la zona.
Otra idea equivocada es que se puede usar cualquier cosa que algo hará. No es así, pues a cada piel debe recibir lo que necesite, para ello yo aconsejo consultar con profesionales, bien del sector de la belleza o a nuestra farmacia de confianza, ya que cada vez cuentan con más laboratorios que nos ofrecen una amplia oferta.
Para encontrar nuestra crema ideal es importante saber qué queremos, si es hidratación, luchar con las bolsas, ojeras o con arrugas... y sea lo que sea, no siempre será resuelto por la misma marca, o por el mismo producto, por ello yo siempre animo a analizarnos muy bien y observar si lo que estamos probando nos funciona o no.
Puede ser que por la mañana te apetezca usar un contorno ligero, otro más intenso para la noche, o puede ser que el mismo en las dos ocasiones. También se da el caso de que lo que una vez nos fue bien, deje de funcionar, y es que tanto por los cambios climáticos, hormonales o por mil cosas, podemos pasar del amor al odio con una crema. Pero que eso no nos desanime para seguir cuidando la piel.
Veo como muchas mujeres (trato más con el género femenino) no consideran importante ese pequeño tiempo empleado para dar esos toquecitos al contorno con un producto especifico, y se ponen en toda la cara lo mismo, sea bueno, malo o regular, a cada zona lo suyo.
No voy a contaros en esta entrada nada acerca de cómo me ha ido a mí con lo que os enseño en la foto, pues son algunos de los que he id0o usando en los últimos meses, y lo he hecho dependiendo de la necesidad y en diferentes estaciones, pero de lo que veis, todo ha hecho su función.
¿Cómo se aplica el contorno de ojos?
Pues nunca se debe poner en los párpados, si en la cuenca y sobre todo en la zona del hueso, no hay que llevarlo más arriba.
No hay que poner una gran cantidad, más bien poca y aplicarla con suaves toques con el dedo anular que es el que menos fuerza ejerce.
Es más importante la constancia que la cantidad.



¿Cuándo de aplica?
Lo ideal es hacerlo dos veces al día, por la mañana y por la noche al limpiarnos el rostro, y antes de la crema para el mismo.
Por la noche es la vez que no se nos debería olvidar nunca, ya que es entonces cuando todo en nuestro cuerpo se vuelve más reactivo a lo que le pongamos y nos ayudará a levantarnos con mejor aspecto.
¿Los más caros son los mejores?
No siempre, el valor añadido de una marca o laboratorio de prestigio es algo muy importante, aunque a veces pueda resultar que no nos venga bien o nos dé alguna reacción alérgica, pero si que influye en la confianza que pueda darnos. Pero ya digo que no siempre, pues cada vez el mercado nos ofrece más variedad, y la oferta y demanda hacen que podamos tener al alcance un abanico enorme tanto de características de las fórmulas como de precio.
¿Cuál es el ideal?
El que se adapte a tu necesidad, a la textura que te guste y a tu bolsillo
Por eso lo más importante es conocer bien nuestra piel, dejarnos aconsejar por profesionales, y sobre todo, todo, todo … ¡la constancia!
Y a los hombres os animo a cuidaros de la misma forma, aunque sé que algunos prefieren que les pongan cremitas y que les mimen ¿verdad? Jeje seguro que conocéis a alguno de esos...sin que nadie se entere, yo sí.
¡Hasta la próxima y buena semana!


martes, 20 de octubre de 2015

Helado de turrón de jijona

Hola a todos.
Antes de hablaros de la receta de hoy, quería pedir disculpas por la ausencia de estas semanas en el blog, pero las circunstancias han sido malas y no he tenido ni ganas, ni tiempo, ni motivación para ponerme a escribir y ni siquiera abrir las redes sociales.
El pasado día 1, se nos fue de forma repentina una de las personas más importantes de la familia, mi suegra. Nos ha dejado un vacío tremendo a todos, una falta que no asumimos todavía. Tenemos todos un nudo que no baja, un tiempo duro en el que estamos recibiendo el apoyo de mi familia, y en especial de mi madre, pues era mutuo el cariño y respeto inmenso que se tenían. Siempre estará en nuestras vidas.


Y como tengo la intención de retomar las ganas de cocinar y publicar, lo hago con un helado que ya hace bastante que tenía pendiente. También creo que os puede venir bien porque ahora se nos empiezan a llenar las tiendas de turrones, y convertirlos en helados o tartas es una forma muy agradable de comerlo cualquier día.
Es sencillo hacer esta receta, si no dispones de heladera, sigue los mismos pasas pero cada medía hora se saca del congelador y se bate, una cuatro veces y así no cristaliza.
Vamos con ello.
Ingredientes:
200 ml de leche
500 ml de leche evaporada ( la he preferido a la nata por ser menos caloríca)
Una tableta de turrón de Jijona (del blando)
2 yemas de huevo
un pellizco de sal


Preparación:
Lo primero es hacer la crema, para ello calentar la leche y la leche evaporada con media tableta de turrón, removiendo para que se deshaga, añadir el azúcar invertido. Cuando esté caliente, sin que hierva, se añaden las yemas y se sigue removiendo.
Reservar y enfriar en la nevera como mínimo 6 horas, mejor de un día a otro.
En la cubeta de la heladera, que debe llevar 24 horas en el congelador, se echa la mezcla, y el resto de turrón se le va añadiendo a trocitos, para que quede el helado con tropezones y mucho más rico.

Espero que os guste.