Así que el domingo necesitaba levantar la cabeza de los libros y relajarme en la cocina-sí relajarme en la cocina, sé que parece raro-. Me puse manos a la obra con la tarta Dacquoise pensando que no sería complicado y que para la merienda la tendría lista. No fue así, lo primero es que empecé tarde, después se me fue la luz natural y las fotos no resultaron como yo quería. Para colmo es una tarta tan dulce...tan dulce, que no me compensó tanto esfuerzo. No diré lo mismo de mi marido que si algo le gusta es lo dulce excesivo, y para él ha sido una tarta de las mejores. Yo prefiero un bizcocho esponjoso y no muy dulce.
El dacquoise es un clásico de la repostería francesa, es merengue con almendra relleno de crema de mantequilla, el que os presento es una versión diferente del conocido pastelero Gaston Lenôtre.
Ingredientes para el merengue:
6 claras de huevo
una pizca de sal
180g de azúcar (para mi gusto mucha)
100g de avellanas tostadas y molidas
2 cucharadas de cacao amargo
Ingredientes para la ganache:
300 g de chocolate de cobertura fondant
250ml de nata
Para decorar:
unas fresas
*Empezamos forrando una bandeja de horno con papel del mismo y se dibujan dos círculos de unos 20 cm con un lápiz.
Se montan las claras a punto de nieve con la sal y se añade la mitad del azúcar, se siguen batiendo y se termina de añadir el azúcar restante, las claras brillarán y entonces se añaden las avellanas molidas junto al cacao, mezclar con movimientos envolventes.
*Echar dos tercios del la mezcla en una manga pastelera con boquilla lisa.
*Dibujar en los círculos dos espirales empezando desde el centro.
Metemos la bandeja en el horno a 110º y se hornea con la puerta entreabierta- sólo un poco- durante al menos 1 hora y media.
Fundimos el chocolate al baño maría y cuando esté listo se añade la nata hirviendo sin dejar de remover, está ganache se deja templar y se pasa al frigo un par de horas.
Despegar los discos del papel y pasar uno de ellos a la bandeja de servir, con la ganache en una manga pastelera, pasamos a repartirlo por el primer disco que habremos puesto, y cerramos con el otro, dejamos un poco de ganache para decorar.
Lo servís con fresas que le viene muy bien al chocolate y su acidez resta dulzor para los que no somos tan dulceros.
Mis consejos:
*Se puede tener la ganache lista del día antes y un ratito antes de rellenar se templa al baño maría.
*El merengue tarda mucho, así que es mejor calcular el tiempo bien.
Que maravilla de tarta!! Preciosa.
ResponderEliminarUn besiño.
impresionante esta tarta, besos
ResponderEliminar¡Tremendo!. Muy apetecible.
ResponderEliminarUn saludo.
Que buenísima pintatiene, seguro que mejor sabe!!
ResponderEliminarque bonitaaaaa pon foto del corte si tienes para q se me caiga la baba ya el todo, .) genial te ha quedado!
ResponderEliminarGuauu, qué preciosidad, Cramen, la foto es buenísima y la pinta de la dacquoise fantástica. Creo que es una receta sofisticada y muy elaborada. Me encanta.
ResponderEliminarvaya delicia maja
ResponderEliminarPues tiene una pinta buenísima. Yo no conocia esta tarta a si que gracias por preparala! Como van los examenes???
ResponderEliminarQué me alegro que o guste!
ResponderEliminarYa sabéis que si la haceis y no os gusta muy dulce poned menos azúcar.
Mar no hubo foto del corte, pero ya te digo yo, nada que ver con na tarta al uso:)
Luz sí que es sofisticada.
Virginia, con muchos nervios:(
Que delicia! Estoy enamorada de la receta :) Gracia por los consejos.
ResponderEliminarHola Carmen! Gracias por pasarte por mi blog y tambiénn por esta tarta, el chocolate siempre es bienvenido para mí!! Un beso
ResponderEliminarWow! Su presentación es fabulosa, es realmente hermoso! Una fiesta para los ojos! Nos vemos pronto! Caroline B.
ResponderEliminarBienvenidas a mi blog Marta, caroline , muchas gracias por vuestros comentarios.
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