He estado mirando mis recetas y me doy cuenta que muchas cosas sencillas no las publico porque me parecen tan obvias que no merece la pena, pero más de una vez mi hija me dice que viene a mirar algo y no lo encuentra, y como una de las razones de este blog es que mis recetas permanezcan para ellas, veréis algunas muy sencillas pero fundamentales en cualquier cocina española.
Los huevos rellenos son un clásico en cualquier celebración, nos saca de apuros en cenas o como entrante, para llevar de picnic o la playa.
Acompaño de ensalada con unos rabanitos de mi mini huerto, que aliñamos con vinagreta.
Ingredientes:
4 huevos
2 cucharadas de mayonesa
2 latas de atún escurridas
una ct de sal
1 cd de vinagre
Preparación:
Cocer los huevos unos diez minutos. Dejar enfriar y pelar, cortar por la mitad y sacar la yema.
Mezclar con el atún, poner la sal y el vinagre, y añadir la mayonesa. Con la ayuda de un tenedor, aplastar todo y rellenar la mitades de claras, si se hace con manga quedan muy presentables y es más fácil.
En verano los pongo mucho, son muy socorridos y te sacan de un apuro!
ResponderEliminarBesos
La verdad es que son un clásico, presente en todas las casas, y vale la pena ponerlos por los motivos que tu has comentado, a mi también me pasa que a veces van a buscar cosas al blog, dando por hecho que estarán ahí y que no encuentran. Los rabanitos están estupendos, se ve que tenéis buena mano para el huerto. Un abrazo y feliz finde.
ResponderEliminarbesosdecanelaymenta.blogspot.com
Que original el relleno, me ha gustado
ResponderEliminarQue receta tan rica y original! me pirran los huevos rellenos desde que era pequeñita!!
ResponderEliminarQue nos olvidamos de los que empiezan Carmen, a mí también me pasa, y al final no ponemos las recetas más sencillas. Esas que cuando empiezas a ponerte el delantal de principiante, te quedan así de resultonas y sin despeinarte mucho, sobre todo si te vienen invitados jaja porque yo lo pasaba fatal, sin saber qué hacer.
ResponderEliminarTus huevos, divinos.
Y cambiando de tema, hace dos años también planté rabanitos, y con una ilusión, en 21 días los tenía fuera y para el plato, mira que da alegría que te comas algo plantado por tí ¿verdad? es como cuando haces un pan, o amasas algo. Sensaciones que satisfacen mucho, pero no se sabe explicar cuanto.
Besotes, mi niña....desaparecida.
Tienes toda la razón, y lo sencillo también tiene su mérito, por cierto ya he vuelto!
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